Bossio | “Es impensado que en un equipo de hoy no haya un director deportivo”

Con una trayectoria de 27 años en el Valencia de España, uno de los candidatos a director deportivo habló de su posible llegada: “Es una ilusión de amor y de cariño por Peñarol”.

Para muchos es el candidato de Edgar Welker. Para otros, aquel viejo campeón de América y del Mundo con el inolvidable Peñarol del 82. Lo cierto, es que a los 54 años Miguel Ángel Bossio es una pieza importante del Valencia de España y se transformó en uno de los tres finalistas por el cargo de director deportivo Carbonero.

“Lo vivo con una ilusión tremenda. Mi mujer me dice que algún día voy a ir a trabajar a Peñarol porque se me ve en la cara que para mí es un orgullo”, contó el ex jugador en Sport 890.

Con 27 años de trayectoria en el club valenciano, 14 de ellos como secretario técnico y tres como director deportivo, dijo sentirse “muy a gusto” con su trabajo pero aclaró que volver a Uruguay “es una ilusión de amor y de cariño por Peñarol. Así como muchos piensan en Europa, yo tengo mucha experiencia adquirida aquí y tengo pendiente trabajar en Peñarol”.

“Hemos estado intercambiando información con Edgar (Por Welker) y con la pequeña junta que trata el tema”, indicó al ser consultado por las negociaciones con la institución y manejó que “en principio las dos partes hemos quedado en pasarnos información por correo electrónico, hablando básicamente de la estructura. De la que hay ahora, de la que quieren lograr. Yo le devolvería cómo la estructuraría yo”. 

“Son las primeras valoraciones. Si a partir de ahí veo que mi idea se puede aplicar y ellos entienden que puede ser beneficiosa para Peñarol, lógicamente avanzaríamos e iría a Uruguay”, explicó luego, aunque de todas formas las cosas podrían adelantarse dado que “en enero estaré allí por el Sudamericano sub 20. Quizá también sea el momento para sentarnos y hablar del proceso”

La importancia del director deportivo

Acerca delo que significa el cargo de director deportivo en la actualidad, Bossio fue terminante: “Es impensado que en un equipo de fútbol de hoy no haya un director deportivo”.

“Me pasaba de ir a torneos en Sudamérica y no me querían acreditar porque no entendían de qué trabajaba. Hoy esto ha cambiado y con el tiempo se darán cuenta de que es básico”, contó como anécdota.

En cuando a la posibilidad de adaptar su función al Aurinegro, señaló que “se necesita un tiempo. No es decir yo voy ahí y monto todo en cuatro meses. Eso es mentira. Hay que trabajar y mucho”.

“Lo lógico es que junto con el entrenador y el gerente deportivo se haga una mesa de trabajo. Lo primero es hacer un análisis de la plantilla y sacar cuáles son las necesidades y las carencias del equipo, para a partir de eso trabajar en la búsqueda de elementos que van a ir aportando cosas positivas a la estructura deportiva. Esto comprende desde el primer equipo hasta los más pequeños”, destacó a modo de síntesis sobre el proceso de trabajo que implantaría.

La relación con Aguirre

Si bien la figura del director deportivo estaría por encima del entrenador, explicó que “hay un objetivo que es básico; los dos trabajamos para que el primer equipo tenga su mejor rendimiento”.

A Diego, “ya lo conozco de un Sudamericano. Me gustó mucho su forma de trabajar con la gente joven. Tiene ideas muy claras”, indicó sobre la posible relación con Aguirre. 

Por último, habló de su vínculo actual con el Valencia y aclaró que en caso de llegar a un acuerdo con el Mirasol, “no habría problema porque si yo planteo que es un tema personal mío, una necesidad, el club no pondría objeción alguna”.

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Foto: Prensa Valencia CF