Diego Forlán jugará en Peñarol

Así lo confirmó su padre quien además aseguró que el fichaje se dará en julio o a más tardar en enero de 2016. “Quiere jugar una Libertadores…Esperemos verlo con la camiseta que quiere mucho desde muy niño; la amarilla y negra”, disparó el Boniato.

Desde Japón, Pablo Forlán dialogó con el programa “Después de hora” que se emite en la radio Concierto Urbana y contó detalles sobre el futuro del mejor jugador en el Mundial de Sudáfrica 2010, Diego Forlán.

“Está con muchas ganas de pegar la vuelta. Son 18 años afuera…El contrato termina en julio, pero puede extenderlo hasta fin de año”, explicó el padre del actual goleador de la segunda división Japonesa que lleva anotados 14 goles en 10 partidos con el Cerezo Osaka

Con 36 años recién cumplidos, la vuelta de Cachavacha parece inminente: “Si no viene ahora a mitad de año, viene en diciembre. Esperemos verlo con la camiseta que quiere mucho desde muy niño; la amarilla y negra”.

Al ser consultado por la presión de ganar por la que muchos piensan emigró al fútbol Nipón, el campeón de América y del mundo con el Carbonero en el 66 fue terminante: “Él quiere esa pimienta. Quiere jugar una Libertadores. Por eso desde acá estamos luchando para que Peñarol llegue a la Copa”.

“Ofertas tiene, pero no quiere más. Quiere estar con la familia, con su gente, vivir momentos”, expresó al tiempo que contó una confesión que su hijo le hizo hace pocos días: “Practico en Los Aromos, salgo y me voy a tomar un café con vos, al club. O te voy a ver jugar al tenis y me río un poco”, dijo Diego.

De todas formas, el Boniato sabe que “las puteadas van a venir, nadie está ajeno a eso. Esto es fútbol. Muchas veces putean a Zalayeta o Alonso, que son jugadores de primer nivel”.

Pero todo vale la pena para una familia de verdaderos Aurinegros que quieren cumplir un sueño: “Quiere entrar con la camisa de Peñarol a ese hermoso estadio que se está construyendo”.

Lo cierto, es que más tarde o más temprano la llagada del jugador con más participaciones en la selección uruguaya (112) se transformará en realidad y es algo que ilusiona en un Campeonato Uruguayo chato y con pocas figuras.

Lejos de lo estrictamente futbolístico, el mundo Forlán y su marca personal de alta jerarquía calzan los puntos para una revolución a todo nivel en Peñarol. Estará en sus dirigentes saber capitalizarla de la forma adecuada.

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